“Se ha vuelto normal que los trabajadores fallezcan, se ha vuelto normal que el señor Perico Pérez fallezca un día, Fulano de Tal fallezca otro día, y esperemos quién va a fallecer en un mes más o en el próximo año. ¡Qué importa! Si la empresa nos dio buenas fiestas de navidad, buenos bonos, nos dio leche cuando cuidábamos el asbesto, nos dejaba dormir en la fábrica, nos dejaba fumar, eran super choros, ¿cierto?”
El relato, mientras encienden velas en una velatón continúa: “20, 30, 40 años después, estamos sufriendo la muerte, en mi caso, de mi padre, en el caso de otras personas de sus abuelos, de sus amigos, de sus vecinos, y eso, me van a perdonar, pero no es normal. Por el hecho de trabajar, por el hecho de ejercer una actividad económica lucrativa legítima para cualquier persona, no le da el derecho a nadie a acabar con su vida”.
Es un avance del documental “Irrespirable”, de la productora Avispa Cine, que realizan una historia en torno al asbesto, las consecuencias para los trabajadores y la búsqueda de la justicia.
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