El arsénico es otro de los contaminantes que afectan la salud de la población de la Región Metropolitana. Así lo afirmó el toxicólogo de la Universidad de Chile, Andrei Tchernitchin, quien explicó las graves consecuencias epidemiológicas de la exposición prolongada al elemento químico.
La contaminación ambiental no solo trae como consecuencia las enfermedades respiratorias que se elevan durante los meses de invierno. Para el jefe del Departamento de Medioambiente del Colegio Médico Andrei Tchernitchin, la mortalidad por cáncer pulmonar es otra de las graves consecuencias de la intoxicación ambiental a la que se ven expuestos los santiaguinos.
En conversación con Radio Universidad de Chile, el toxicólogo de la Universidad de Chile, explicó que el esmog y el arsénico son las principales responsables de esta situación, siendo en el sector oriente y centro de la capital donde más prevalencia tiene la mortal enfermedad.
Según sus interpretaciones, la diferencia en número de enfermos podría radicar en los horarios y zonas de distribución de los contaminantes. Así, explicó que ésta es muy alta en Santiago Poniente entre las 00:00hrs y 04:00hrs de la madrugada, cuando las personas están en reposo y por lo tanto, respiran con menor intensidad.
En cambio, en Santiago Centro, Providencia y parte baja de Las Condes el peak es a las 18 horas, cuando las personas transitan devuelta a casa. “Todos llegan agitados del trabajo y salen a hacer ejercicio, andar en bicicleta, justo en la hora más contaminada. Por lo tanto, al aumentar el volumen respiratorio, quedan depositadas más sustancias tóxicas en los pulmones y el daño es mayor. Este podría ser, en parte, la explicación del por qué se ha encontrado más cáncer pulmonar en Santiago Oriente, que en Santiago Poniente”.
Las mediciones de arsénico también se han disparado en la zona oriente de la capital. Junto con la presencia del contaminante, se ha reflejado un incremento de cáncer a la vejiga en la población, además
enfermedades cardiovasculares, cerebrovasculares, efectos inmunológicos, cáncer de pulmón, de vejiga urinaria e hígado y en las mujeres embarazadas aumento de abortos espontáneos, mutaciones, malformaciones fetales, entre otros fenómenos genéticos.
La minería sería una de las principales responsables de las alzas de partículas emitidas al ambiente. Tchernitchin recordó que la Comisión Nacional del Medio Ambiente (CONAMA) pidió hacer un estudio al respecto, pero de la modelación del azufre emitido por tres plantas de pre fundiciones que pueden estar influyendo en las patologías que se desarrollan en la Región Metropolitana.
Sobre esto, explicó que desde Conama vieron que parte importante del azufre que salía por la chimenea de la Fundición de Caletones, de Codelco (ubicada en la pre cordillera de la región de O´Higgins), se desplazaba por la pre cordillera y afectaba a Santiago oriente. Situación que le hacía concluir que el arsénico desprendido de la misma repartición, repetía el comportamiento y se alojaba en la parte alta de la ciudad.
Además de los hallazgos en la zona oriente, el científico confirmó su presencia en el norponiente de Santiago, específicamente en Rungue, en la comuna de Lampa cerca del Tranque Agrícola, sitio donde había un botadero de relaves mineros de la ex Fundición Refimet. También en norias que alimentan el cementerio en Quilicura; en estero Las Cruces y una línea que va un poco más oriente de la Laguna de Batuco y, luego, en dirección a los cerros, en la cumbre está el Tranque de Minera Anglo American, puntos desde donde se podría filtrar la contaminación hacia el sur.
Fuente: Universidad de Chile